Cuando visitas Calpe quedas prendado por su encanto. La gran atracción que el entorno natural de este soleado pueblo de la Costa Blanca emite sobre sus visitantes provocó su precoz transformación turística adelantándose, incluso, al boom de los años setenta. Muchos turistas, cautivados por este paradisiaco rincón de España, optan por comprar una propiedad en Calpe para disfrutar del sol y de sus playas durante todo el año. Hoy en día, casi la mitad de su población está formada por habitantes de otros países europeos, principalmente ingleses, alemanes, rusos, rumanos, franceses, etc.
Calpe se sitúa al pie de uno de los principales iconos de la Costa Blanca: el Peñón de Ifach. Esta enorme roca que, con sus más de trescientos metros de altura domina el Mediterráneo, está declarada Parque Natural. El Peñón de Ifach es uno de los parajes más fotografiados y visitados de la Costa Blanca. También es uno de los lugares más concurridos por los apasionados del senderismo. Los más deportistas pueden acceder hasta su cima desde donde se observan espectaculares vistas sobre el mar, Formentera, Ibiza y el Cabo de Santa Pola. Pero, también hay una ruta más sencilla que es ideal para compartir con toda la familia. En su trayecto encontrarás gran variedad de aves: gaviotas, estorninos, cernícalos, halcones, cormoranes, vencejos, … así como una interesante vegetación autóctona.
Situado junto al Peñón de Ifach se encuentra el Parque Natural de las Salinas que puedes visitar a pie o en bicicleta por un sendero fácilmente identificable. Te sorprenderá comprobar la gran cantidad de aves migratorias que descansan en este lugar protegido donde puedes observar numerosos flamencos y cigüeñas. Antes de declararse parque natural, este lugar fue una explotación salinera que ha estado funcionando durante varios siglos y que tiene sus inicios en la época romana, en la que la sal era fundamental para la conservación de alimentos.
Las extensas playas de Calpe son de fama internacional. La playa del Arenal – Bol es la más popular al encontrarse en la zona del casco antiguo. Sus arenas doradas y finas son perfectas para relajarse y tomar el sol. Cualquier época del año puedes disfrutar de placenteros paseos por la orilla del mar o, si lo prefieres, practicar windsurf, esquí acuático, surf, paddleboard, … A lo largo de la playa encontrarás diversas casetas para alquilar los equipos necesarios. Si prefieres un estilo de vida más relajado, imagínate en la soleada terraza de una cafetería de su animado Paseo Marítimo con vistas a la Bahía de Calpe. Es el punto de encuentro perfecto para quedar con tus amigos. En la espectacular Playa de Levante o de la Fossa te encantará su arena fina, sobre todo para jugar con los más pequeños de la familia, pero también encontrarás zonas de roca o de cantos rodados.
En el litoral de Calpe se entrelazan las calas de gran belleza, un pequeño paraíso de arena o de grava que te hechizará. Incluso, algunas de ellas, son solo accesibles desde el mar: En la “Cala Gasparet” o en la “Cala Racó del Corv” los buceadores pueden disfrutar de su precioso fondo marino.
¿Te gustaría bañarte en una piscina de la época romana? En Calpe es posible. En los Baños de la Reina encontramos un importante yacimiento arqueológico con restos de un palacio y de unas termas romanas. Además, también hay unas balsas excavadas en la roca junto al mar que se utilizaban como piscifactoría para, más tarde, hacer salazón y conserva de pescado. Actualmente, puedes darte un chapuzón en estas fabulosas piscinas artificiales con historia.
En el Puerto Deportivo de Calpe, situado al abrigo del Peñón de Ifach, además de amarrar tu yate o de alquilar una embarcación dispones de una escuela de vela y de buceo, una divertida experiencia para los más audaces.
Te encantará callejear por el bullicioso casco antiguo de Calpe y seguir la Ruta Turística que encontrarás perfectamente señalizada y que te muestra museos, su iglesia, los rincones más interesantes, … La muralla defensiva y la “Torre de la Peça” tenían la función de defender, en el siglo XV, a los habitantes de la población del ataque y de las incursiones de piratas y corsarios. Los domingos puedes visitar su mercadillo ambulante. Encontrarás artículos de artesanía, ropa, dulces típicos, libros de ocasión y también verduras y frutas recién cosechadas en las huertas del entorno.
Calpe es una localidad tradicionalmente pesquera. A las cinco de la tarde llegan los barcos de pesca al puerto con su cargamento de fresquísimo pescado y marisco. Es un espectáculo que no puedes perderte. Te recomendamos que asistas a la Lonja de pescado a presenciar la subasta. En sus alrededores encontrarás numerosos restaurantes donde podrás degustar exquisitos platos con este pescado de extraordinaria calidad.
La bahía de Calpe se encuentra totalmente urbanizada por modernos edificios de apartamentos y lujosos residenciales de villas, bungalows, adosados, dúplex, … La Muralla Roja es un emblemático edificio que no te dejará indiferente. Diseñado por el famoso arquitecto español Ricardo Bofill, se construyó en 1973 y evoca a la arquitectura tradicional árabe mediterránea.
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